domingo, 16 de junio de 2013

Sevillanas de barrio

El video es malillo y el sonido pesimo ,pero me han pedido que lo cuelgue para que pueda verlo la gente interesada.El día era de perros,como hace meses en el Norte ,quien nos iba a decir que en pleno junio debiamos sacar los abrigos.Claro que ante una sevillana no hay frio que valga,sobraba todo.

sábado, 1 de junio de 2013

Militares,Virgenes y Nosotras

Unos son locos de concentraciones moteras , o encerrarse durante 90 minutos en un campo de futbol, otros por largos y peligrosas caminatas por el monte o cumbres , a mis amigas y a mí nos da de vez en cuando por la peregrinación mariana.

Cada uno encuentra paz y estabilidad como puede, nosotras llevábamos 3 años sin visitar a nuestra señora de Lourdes , y nuestro día preferido es el de la concentración militar internacional, en muchos sitios se ha criticado que defensa dedique dinero de nuestra maltrecha economía en viajes espirituales, cuando los favores de la Virgen no son tangibles y no se miden en dinero.(no voy a meterme en ese charco),pero más gastamos en enviar a nuestros jóvenes a guerras que no son nuestras y donde su población no lo agradece.

Salimos el sábado hacía las 10 de la mañana, cargadas con un pijama y unas bragas limpias, para pasar una noche fuera de casa y sin “tema” pendiente , no se necesita más. El viaje fue tranquilito y sin prisas, tanto fue así que tardamos 4 horas en llegar, en el Citotel nos esperaba la habitación 36 amplia, calentita, con ventanales a un patio. La temperatura exterior era de 11grados y caían aguaceros intermitentes.

                                        ¡¡que guapas!!
Aun así salimos e intercambiamos visitas eclesiásticas con tiendas de regalos y exvotos, cuando la lluvia nos lo permitía paseábamos por la pequeña ciudad de Lourdes viendo su rio embravecido golpear los bajos de sus casas.

Lo interesante comenzó a las 9 era la hora de la procesión y rosario (nunca he entendido de esas cosas, me han dicho que son 15 sus misterios) es una sensación diferente tras los guardias del vaticano y rezando el rosario con la bandera al frente salían los números países concentrados ,sus militares ataviados con vistosos trajes ,los más llamativos los cosacos con sus plumas y detrás procesando sus peregrinos, nosotras por supuesto detrás de los picoletos cerrando la pequeña concentración española. Fue hora y media de procesión con un frio casi polar. No puedo explicar la sensación de unión entre gentes de diversas lenguas y países por un mismo sentimiento ,no importaba la lengua en que se cantase la salve de Lourdes, el estribillo era coreado con las mismas palabras , diferentes acentos y con las antorchas en alto dirigidas hacia la Señora.

La serpiente luminosa que formábamos era recibida y flanqueada por grupos de espectadores que llenaban la explanada cuando ya era noche cerrada, allí nos concentramos y tras escuchar unas salve preciosa en diferentes idiomas y tras la catarsis de la oración colectiva nos disolvimos cargadas de espiritualidad.

Cansadas como estábamos nos dirigimos al hotel , pero el canto de un grupo de soldados croatas nos desvió del camino ,allí hermanamos con ellos escuchando sus cantos que no entendíamos y que podía ser nuestro porompompero o nuestra “ay Carmela”.Nos invitaron a un chupito que para mí era orujo gallego y nos ofrecieron folletos de su bello país (eso es hacer patria ) tuvimos que sujetar a mi compi Lourdes que amagaba con ponerse a bailar cual osa de feria con los alegres soldados. Después de unas cuantas canciones y calentitas de orujo arrastramos como pudimos a Lourdes (si,se llama como la Virgen) y nos fuimos al hotel a descansar.

El día siguiente lo dedicamos a las compras hasta acabar con el presupuesto mensual y observar maravilladas los mini desfiles militares y sus bandas de músicales. Tras una suculenta comida con un entrecot uhmmmmm que delicia, se deshacía en la boca, retornamos a nuestras casas parando a tomarnos un cafecito cerca de Orthez en el cruce de caminos del camino de Santiago francés ……pero esa será otra historia.
                   
                              Ave, Ave, Ave María.


                              Ave, Ave, Ave María.