lunes, 29 de enero de 2018

Y siguen llegando...




A las 8 con  el sueño entre los ojos esperas el amanecer, tus quehaceres diarios  son ya una rutina. Todos los días y lo mismo todos los días. Algo altera el risueño rubor de tu rostro, una sombra de ira y una sonrisa burlona aparece en él.
Aparece un ¿ Cómo estas?, un te recuerdo, un feliz año, un no te olvido, un no me importa y un te extraño, un no te miro y un mírame .Asoma un brillo en tu rostro ,¿sorpresa? Ya no,hubo una primera vez que te desconcertó, que hizo cimbrear tu fortaleza desde la punta de tus pies, luego llegaron las otras, unas veces risa, otras rabia, otras impulsos de respuesta, otras veces de indiferencia. Fuiste  asesorada y contenida.
Te imaginas ,te preguntas y respondes.
Siempre el día anterior es necesario que ella partiera en tu busca, saliste de una memoria que se resiste al olvido, un corazón que piensa y unas manos obedientes, como lejanos y desconocidos  mensajes en la madrugadas pasadas.
Ya no son fantasmas sobre tu coche, llegan en cajas repletas  ( ellas solitarias), ansiosas de ser recibidas por otras manos que trabajan apresuradas ,como ecos de un deseo pasado, doloridas quizás. Mal presagio para el olvido.
Se acumulan en un rincón sobres con membrete

La carta y la despedida


He leído esta emotiva carta de despedida de Mila Ximenez en su blog de lecturas a quien confiesa era su gran amor.

Tan bella y desgarradora es la despedida del que se va como de quien se queda.


"Hoy se ha ido parte de mi vida.La muerte me ha arrancado un futuro cargado de pasión y caricias ajeas al mundo .Jamás volveré a abrazarle en ese mundo mágico de clandestinidad que nos salvaba del frío de la calle"

"Jamás amé tanto a alguien y jamás me obstiné tanto en la torpeza de no demostrárselo .La pasión que sentía por él me hacia su prisionera y me perdí un trayecto en común.Ahora mi presente emocional y mi futuro soñado se convierten en cenizas".

"hoy estoy triste pero también rabiosa.Creía que la espera jugaba a nuestro favor, sin pensar que el destino nos abandonaba cuando la guadaña toma el relevo.Disfrutaba de la soledad,pero tenia billete abierto para
viajar al abrazo de nuevo.jamás haré ese trayecto y solo me quedará despedirme en el andén que imaginaré en mis sueños.Alguien dijo que nadie muere del todo mientras se le recuerde.Seguirás conmigo hasta que el recuerdo me abandone".

                                                La carta
Mi carta,que es feliz,pues va a buscaros,
cuenta os dará de la memoria mía.
Aquel fantasma soy que, por gustaros,
jugó estar viva a vuestro lado un día.

Cuando lleve esta carta a vuestro oído
el eco de mi amor y mis dolores
el cuerpo en que mi espíritu ha vivido
ya durmiendo estará bajo unas flores.

Por no dar fin a la ventura mía,
la escribo larga...casi interminables...
¡mi agonía es la bárbara agonía
del que quiere evitar lo  inevitable!

Hundiéndose al morir sobre mi frente
el palacio ideal de mi quimera,
de todo mi pasado,solamente
esta pena que os doy borrar quisiera.

Me rebelo a morir,pero es precioso...
¡el triste vive y el dichoso muere¡...
¡Cuanto quise morir,Dios no lo quiso;
hoy que quiero vivir,Dios no lo quiere!

¡os amo,si!Dejadme que habladora
me repita esta voz tan repetida;
que las cosas más intimas ahora
se escapen de mis labios con mi vida

Hasta furiosa, a mi que ya no existo,
la idea de los celos importuna;
¡juradme que esos ojos que me han visto
nunca el rostro verán de otra ninguna!

Y si aquella mujer de aquella historia
vuelve a formar de nuevo vuestro encanto,
aunque os ame,gemid de mi memoria;
¡yo os hubiera también amado tanto!..

Mas tal vez allá arriba nos veremos,
después de esta existencia pasajera,
cuando los dos,como en el tren,lleguemos
de vuestra vida a la estación postrera.

¡ya me siento morir!...El cielo os guarde.
Ciudad,siempre que nazca o muera el día,
de mirar al lucero de la tarde,
esa estrella que siempre ha sido mía.

Pues yo desde ella os estaré mirando;
y como el bien con la virtud se labra,
para verme mejor, yo haré,rezando,
que Dios de par en par el cielo os abra.

¡Nunca olvidéis a esta infeliz amante
que os cita,cuando os deja,para el cielo!
¡si es verdad que me amasteis un instante,
llorad,porque eso sirve de consuelo!..

¡oh Padre de las almas pecadoras,
conceded el perdón al alma mía!
¡Amé mucho,Señor y muchas horas;
más sufrí por más tiempo todavía!

¡Adiós,adiós!¡Como hablo delirando,
no sé decir lo que deciros quiero!
¡Yo solo sé de mi que estoy llorando,
que sufro,que os amaba... y que me muero!

fragmento de El tren expreso       RAMON DE CAMPOAMOR




que corto el adiós y que largo el olvido...