martes, 17 de abril de 2018

Cabeza de mujer 1480 Leonardo Da Vinci



Destaca la sonrisa leve de un rostro perfecto,dulce y sonriente

En esta época se produce la recuperación de la manera clásica, de Grecia y Roma, de concebir el rostro y el cuerpo plenamente inspirados en las leyes de la armonía pitagóricas y en el ideal platónico de lo bello. 

En las pinturas de la época se observan las mujeres de perfil para resaltar una frente muy amplia, conseguida por medio de la depilación¡¡¡ay que daño!!!, con cabellos tirantes y levantados. Las cejas son finas. Pobrecillas,condenadas de por vida a llevar una fina linea sobre los ojos.
 
Las damas elegantes del Renacimiento prefieren los cabellos rubios y en ocasiones llevan la parte superior de un color y los costados de otro(PARA QUE ALGUNAS VAYAN DE MODERNAS AHORA) lo que ahora se llamaría una mechas californianas.

El pelo dividido al medio se lleva liso hacia la nuca, tapando las orejas,lo más bello el sfumatto que produce una aire evanescente y eterno a su rostro. 

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